Voy a
arrojar mis palabras al viento
hoy tu
silencio y el mío
pueden verse
tan lejanos quedando
ya perdidos
en los vacíos de esas promesas
en un sinfín
de momentos y sueños rotos.
Escuché esa
suave voz como el eco
entre el
silbido del viento
una suave
melodía dibujando los sueños
son esas
huellas profundas hirientes
que llegaban
a formar escasamente,
una mirada,
un beso una caricia.
Para golpear
fuerte en la escarcha
de las
noches y se perdían en la nada
talvez fue
la ilusión que perdida dejo
gris el alma
y frustrada entre la ansiedad
de poder
rencontrar ese camino.
Que me
llenaba de amor
el corazon,
censurando los llanos
del alma que
sin pedir permiso se alejó
algún día
acallando mis días
en los lazos
de sueños, entrelazándose
a mis versos,
donde las palabras.
Son más
fuerte como un torbellino
sobre la verdad en
algunos gestos
que intentaban sobrepasar en mis recuerdos
que intentaban sobrepasar en mis recuerdos
todo suena
como una canción que se repite
al sentir
los susurros mensajeros de la vida
porque todo
en su nombre se ilumino.
Y fuimos
dos, compartiendo la ternura
donde nos
atrevimos a soñar, si algún día!
donde todo parecía
eterno
pero ahora he
deambulado sola
mientras
sollozaba mi alma
donde parece
que el tiempo se detuvo.
Ya muy
lejano en las letras triste
y quedó así
como una mancha dispersa
en esos
libros, que ya no quiero leer
¿Hay un
lugar donde perdure el amor?
No sé…!!
Pero ahora solo guardaré
en el cofre
del dolor, lo vivido.
Seré guardiana
de mi destino, sin ti
es ver que
tus ojos ya no se reflejan en mí
tu alimento para mis carencias
tu alimento para mis carencias
volvió mi
inspiración en su fría capa de hielo
sobre un corazon herido
sobre un corazon herido
aunque yo te
amo todavía
en un ayer
que lastima la piel.
Autora – Alejandra Martinez
Derecho De
Autor Reservado